jueves, 31 de diciembre de 2009

Una despedida para el 2009 y la generación 2000.

Como todos sabemos el 2009 no sólo ha llegado a su fin, también una generación conocida como el 2000. Pasaron muchos acontecimientos que alteraron la mente humana, pero aún así la raza continua en su existencia.

Ahora nace una nueva generación, conocida como los 2010´s. Existen rumores como, por ejemplo, el fin del mundo en el año 2012. Personalmente creo que el principio de estos 2 años florecerán muchas teorías relacionadas con este hecho, y cuando llegue el día y nos sorprendamos por no encontrar absolutamente nada, será allí cuando comience a calmarse está generación.

En fin, sólo quería desearles un maravilloso año a ustedes, fiel lectores. Espero que sigan visitando mi blog. Sí la vida me permite permanecer en ella, seguiré posteando más textos.

Recuerden cuidarse y comer mucho en la última cena de este año y generación.

Michael W. McGivern.

martes, 29 de diciembre de 2009

Añoranza.


Te vi posar frente a mi habitación,

Mientras leía algunas cartas que una vez me escribiste.

Cantaba seis baladas ochenteras,

A la deriva de seis porros que encendía a tu nombre.


Contemplaste mi cuerpo en plena desnudes.

Te transformaste en la manta que cubre mi mortalidad.

Siempre lo hiciste con frialdad.


Salpique cada gota de whisky entre tus senos,

Durante mi eyaculación.

A las seis de la tarde,

Ese cuerpo magnifico partía de forma sublime.

Precisamente a esa hora, el fin de una tarde.


Cuando el miedo se enfocaba,

Aparecía esa alma.

Negra, sucia y cruel.

Me preguntaba: ¿Dónde estás?


Tu sonrisa era como un esbozo intacto.

La mirada tuya era una nota que tomaba la perfección entre mis ojos,

Que ahora se desvían entre la realidad.


Sé que me has buscado,

Cuando pierdo la coordinación.

No tengo más nada que hacer,

¿Acaso cuenta mi vigor?


Ahora, presumes lo que es tangible para ti.

Lo que yo no puedo presumir, dado a mi soledad.

Tal vez mi destino sea masturbarme en cada atardecer,

Sentado en una roca frente al mar.

Haciéndolo siempre a tu honor.

jueves, 24 de diciembre de 2009

Pensamiento ( I )

"Hasta el mismísimo loco es más consiente de la esclavitud que se germina en los pensamientos del hombre."

Michael W. McGivern.

miércoles, 23 de diciembre de 2009

El cementerio de los versos.


No es un poema de amores y nostalgias.

Tampoco de felicidad y proseguimiento.

Esto es un poema de terminación, es decir, muerte.


Son más de mil versos que posan bajo tierra,

Sin la esperanza de revivir.

Apagadas sus melodías,

Y sus sentimientos sustanciosos.


La sangre,

Se descuartiza sin privanza,

Sin cariño alguno.

Durante la emisión de esta copla en la mente del ya muerto.



Prosiguen los supervivientes,

Observando con una mirada.

-¿Por qué tengo que vivir?- Se preguntan en cada alba.


No fijen sus pupilas en la tensión.

¡Qué llegue la calma llena de dolor!


Entonces,

Que nos lleve una nube de sangre.

Mientras suena la melodía de estos versos,

Conocidos como muertos.

lunes, 21 de diciembre de 2009

Conciencia con apariencia de ganso.


Uno no cree en sus mismos sueños, hasta que los experimenta. La noche anterior, después de un día lleno de trajines, me había acostado para descansar un poco. Luego de haberme acurrucado entre las mantas, termine en un estado que jamás había experimentado: Me encontraba en un lugar que mi mente había creado. Muchos dirán que lo sucedido fue falso, que solo fue un sueño, pero yo sí creo en el acontecimiento de anoche. Por eso he tomado la determinación de compartir esto con ustedes, lectores.

Anoche me encontraba en un pasillo con un tipo muy alto, tal vez hasta más alto que mis propios sueños. Este saludaba, como quien dice: Llega, llega, no pasa nada, llega. Me encontraba fuera de órbita, simplemente no sabía dónde estaba. Con el pasar del tiempo este tipo dejo de congratular mi indiferencia hacía el y se fue aproximando cerca del otro extremo del pasillo, donde me permanecía yo.

Pasaron los segundos y podía sentir que este tipo talludo veía mis pupilas, como si no fuera de ese lugar. - ¿Y tú qué haces aquí? No deberías estar acá…- Me reclamó el tipo misteriosamente. Yo no dije nada, no sabía cómo replicarle. - ¿Quién eres tú?- Le respondí con mi voz temblorosa. Como cosa extraña, este se fue en risa… Yo, perdido entre la situación, decidí evadir al que tenia al frente riéndose sin razón alguna. Pero mientras me retiraba, sentí un eco fluir en todo el pasillo.- Michael, soy tu conciencia...- Y se apago el eco en menos de 6 segundos.

No podía verle la cara, una sombra la resguardaba, los dedos los movía como tuviese un plan macabro. - ¿Qué hago aquí? ¿Cómo aparecí en este lugar? Sí me encontraba en mi cama hace unos minutos…- Reproche. El tipo no respondió nada y se metió las manos en el bolsillo. -Toma- Me dijo, mientras encendía un tabaco. El objeto que me entrego era como una especie de cristal, este era frío. De repente comenzaron a plasmarse imágenes que existieron en algún lapso de mi vida, la sensación que sentía era única, pero aún así no lograba descifrar él porque me encontraba allí.

Pasaron dos minutos, mientras yo observaba esta bola de cristal que contenía todos los sucesos que mi vida llevaba desde el periodo donde comencé a existir, hasta mi presente. La pelota helada me plasmo todo, hasta llegar al punto de ver mi presente en ese pasillo, como encontrarte a ti mismo en una cámara web.

Lo has visto todo- Menciono con frialdad.

¿Por qué me encuentro aquí?- Insistí.

Cuando muera entenderás- Me respondió mi propia conciencia.

Luego de despertar del estado en el que me encontraba, estaba impactado con la respuesta que obtuve de mi conciencia. No le comente a nadie sobre aquel “sueño” que tuve, pero creí que era hora de teclear está experiencia perturbadora tanto para mí como para mi conciencia. No creo que vuelva a encontrarme con esa conciencia con apariencia de ganso, pero mientras tanto seguiré preguntándome: ¿Qué sucedió allí?

sábado, 19 de diciembre de 2009

Escúchame, por favor.

Hoy soy lo que probablemente no llegue a ser de aquí a cien años,

Alguien lleno de entusiasmo.

Me convertiré en el aliento de una candela triste,

Mientras se quema cada recuerdo que en un tiempo revivió.


Negro seré,

La triste ausencia de un color.

Por más fuerte que ha de semejarse,

Sólo me transforma en un alejamiento.


Hacía ti.

Hacía mí.


Las llamas de mis dedos.

Calientes, llenas de ardor.

Aumenta mi agonía.

Escúchame, por favor.


Habré marchitado cada verso antes de partir,

Sin ninguna pasión.

Con celeridad.


El viento corre deprisa,

Evitando que mi voz sea escuchada.

¡Que me liberen de este tormento!

Escúchame, por favor.


Entonces,

Nacerá un vivo recuerdo,

Pero jamás ese recuerdo.

¿Dónde está mi musa?

Que me escuche por última vez,

Por favor…

miércoles, 16 de diciembre de 2009

Un poema muerto.


Tan muerto como mi esperanza.

Frío como serán mis ojos.

Lento como la sangre que se derramara por mi rostro.

Perecedero.

Tranquila, aquí me encuentro.


Aquí me encuentro yo, observándote en mi mundo.

Así no seas parte de mi carne.

Ni siquiera de mi espíritu.


Estúpido el recuerdo,

Cuando era real.

Ahora, las luces de la nostalgia encandelan mis ojos.

Que me libere el viento.

Por seis segundos.


Mis dedos, sucios de alucinación.

¿Qué puedo hacer?

Tal vez contemplar el ciclo de mi existencia,

Mientras engrosa tu ausencia.


Al final de mi vida me iré.

Como la arena que vuela y jamás vuelve.

Ha de ocurrir lo mismo con mi voz,

Y cuando sea apagada,

Sera el final de este fúnebre dolor.

sábado, 12 de diciembre de 2009

Contradicciones entre el "Yo", "El" y "Ellos".


A veces somos tan distantes a la hora de recordar, que olvidamos hasta nuestros propios recorridos en el transcurso de nuestra existencia. Volteamos y observamos aquella distancia llena de sucesos que en nuestra memoria se esfumaron.

Ayer, por ejemplo, me encontraba consumido en el presente. En este lapso, desesperadamente pedimos placer momentáneo sin importar las consecuencias. Cuando pasa el tiempo comprendes lo sucedido;Es decir, cuando el presente se transforma en un hecho que ya sucedió: Pasado.

Somos bastantes distantes. Mientras nuestra materia gris cree en algo, las voces en nuestro alrededor nos dan a entender lo opuesto. Siempre existe una contradicción entre el “Yo”, “el” y “Ellos”. Esporádicamente el “Yo” tiene la razón, dado al egoísmo que nos abarca diariamente.

En fin, es necesario tener autocontrol a la hora que se manifieste el presente en nuestras narices llenas de tentación. Mientras tanto seguiré escribiendo unos cuantos blogs en lo que queda del 2009, mientras el sonido de mi aire acondicionado me mantenga alerta de mi inspiración.

Michael W. McGivern

miércoles, 2 de diciembre de 2009

Meditación # 4

Así nos ocultamos, completamente desnudos, entre vestidos que usamos.
-Michael W. McGivern